Hace unos meses decidí vender mis fermentadores cónicos SS Brewtech. No he tenido desde entonces ni creo tener nunca fermentadores más hermosos, se ven espectaculares donde sea que los pongas y con un sistema que me armé de recirculación de agua fría lograba un swing de temperatura de 0.4°C. Nada mal para una cerveza que se hace en el 4to piso de un edificio de departamentos.
Las razones por las que decidí deshacerme de ellos no son importantes, basta con decir que a pesar de que funcionaban muy bien, mis necesidades eran otras. Encantado con la calidad de SS Brewtech y al ser ávido escucha de diversos podcasts cerveceros donde le tiran flores a diestra y siniestra, decidí investigar la opción de conseguir un SS Brewtech Brew Bucket en México.
¿Dónde y Cuánto?
De entrada, no hay muchas opciones, realmente sólo tres opciones: Pedirle a alguien que te lo cruce en la forntera, Fermentando.com ($6190), donde tienes que esperar hasta 20 días hábiles para que lo crucen ellos y de su centro de distribución te lo manden, o CervezaCasera.com.mx ($6544), donde lo tienen en entrega inmediata. Armado con mi experiencia en costos de los cónicos y los tiempos de entrega, los precios se me hicieron adecuados y felizmente elegí el de CervezaCasera.com.mx.
¿Qué es un Brew Bucket?
Como su nombre lo indica, es el quivalente de SS Brewtech de una cubeta, simple y llanamente. Obviamente, en este caso, es una cubeta de acero inox 304, pero además tiene algunas monadas que ayudan a hacer los días de fermentación más agradable, la primera y más notoria es un pequeño cono en el fondo que ayuda a mantener la levadura y dry hop lejos del puerto de salida, dicho puerto de salida tiene una válvula bola de 3/8″ con terminación en espiga y dip tube rotatorio en el interior. En el interior también cuenta con marcas en litros y galones a partir de 15 L.

Cuenta además con una tapa plana de acero inoxidable que cierra a presión con 4 seguros. Está calificado para mantener presiones de hasta 1 PSI, por lo que permite hacer transferencias a presión, pero no fermentar a presión. Finalmente, cuenta con 4 patas de acero inoxidable y 4 asas soldadas a los costados (en la presentación de 14 gal se recomienda no cargar el fermentador de las asas cuando esté lleno). Tiene unas medidas de 34 cm de diámetro en su punto más ancho y 54 cm de alto para la versión de 7 gal. Además, la versión Brewmaster incluye un termopozo y un termómetro digital.
Y, ¿qué tal?
Debería empezar por decir que el primer fermentador que tuve en mi vida fueron cubetas de HDPE. Las amaba con locura. La razón es muy simple, son la cosa más simple de lavar en la vida. Al tener una boca tan grande es facilísimo llegar a cualquier recoveco para limpiarlos; esto se traduce 1:1 con el Brew Bucket e incluso mejor por el hecho de ser Inox. Después de vivir con cónicos y tener que usar un Spray Ball con bomba para lavarlos, decidí que quería volver a la simplicidad de las cubetas pero seguía enamorado de la robustez y la versatilidad del acero inoxidable.
A pesar de su mala fama, también soy muy fan de las espigas. Permiten tomar muestras casi sin esfuerzo y hacen de las transferencias una delicia. Es cierto que pueden llegar a ensuciarse, pero en mi caso siempre las limpio antes y después de usarlas con un cepillo suave sanitizado y hasta hoy no he tenido problemas. Si tuviera una queja sobre la espiga es el hecho de que venga con una válvula bola. No es la elección más sanitaria y hay que tener mucho cuidado al lavar a fin de evitar que pudieran quedar atrapadas bacterias o cualquier líquido en ella. SS Brewtech debió haber tomado esto en cuenta y aunque la válvula es fácil de desarmar y limpiar (yo no lo hago para cada lote), hubiera sido mucho mejor contar con una válvula más sanitaria,
En cuanto al dip tube giratorio, la verdad rara vez lo uso y estoy muy seguro que eventualmente dejaré de siquiera agregarlo cuando use el fermentador. La primera vez que lo usé, tuve una fuga en la válvula. La única razón por la que lo uso ahora es para agregar un pequeño filtro para dry hoping (ver Fig. 3).
Las transferencias cerradas han funcionado bien en general, en la mayoría de los casos si se usa un Bucle Cerrado (ver Fig. 4) las transferencias son extremadamente lentas, en parte por la naturaleza de la transferencia y en parte por la restricción de la válvula de tan solo 3/8″, en mi lista de deseos también está una válvula de 1/2″. Aunque eventualmente en la línea para transferir a un barril habrá una reducción a 3/8″ por lo que no es un gran problema.
Fig 2. Cold Crash con poste Ball Lock. Fig 3. Filtro para Dry Hop en el Dip Tube. Fig 4. Transferencia en bucle cerrado.
Por último algo que me encantó es el hoyo para el airlock, es de 17mm, pensado para usar un tubo de 1/2″ como blow off, pero su servidor le agregó un poste Ball Lock de gas (ver Fig. 2). Cuando voy a iniciar Cold Crash, simplemente desconecto mi blow off y evito cualquier tipo de succión de aire (o sanitizante), cuando voy a transferir, simplemente lleno el vacío parcial con CO2. Esto me ha permitido tener IPAs super frescas por más de 6 meses en mi keezer, nada mal.
Conclusiones.
¿Es el SS Brew Bucket el mejor fermentador del mundo? Seguramente no. ¿Vale lo que cuesta? Dependerá muchísimo del valor que le des a tu dinero en este hobby. Lo que sí puedo decir con absoluta certeza es que si decides conseguir uno, no te arrepentirás. Después de la experiencia que tuve con los cónicos entendí que no son para todo mundo, ahora creo que no los volvería a comprar. Para mí, un fermentador debe ser robusto, versátil y, sobre todo, extremadamente fácil de lavar (literal me toma 5 minutos). Cosas que el Brew Bucket cumple con creces. Quizá su mayor problema sea que no permite fermentar a presión, pero en lo personal, no pretendo experimentar con eso pronto.